"El ingenio rápido e incisivo y la euforia vital de los pueblos costeños, trasciende hasta el estilo musical, que a modo de estampa de abigarrados colores, vuelca los conceptos contenidos en las diversas anécdotas diarias, el paisaje y las costumbres populares de esas tierras y en consonancia con la cadencia rítmica que le sirve de vehículo expresivo, recibe el nombre de HUAPANGO, cuya onomatopeya lleva en sí la eufonía y métrica del compás tropical.La interpretación de esta música nunca podrá tener en otras versiones, la vitalidad que le imprimen los nativos de la región, para quienes el Huapango forma parte inseparable de su personalidad y esencia, ya que desde sus primeros balbuceos los ha alimentado al parejo de la leche materna y al paso de los años es como un amigo íntimo a quien se confían alegrías y también penas, las cuales puestas en música parecen menores o definitivamente se tornan burlón desprecio del dolor.
El conjunto Los Tilingos y sus pregoneros Pedro Rodales y Pepe Valdés, proceden de la feraz tierra veracruzana y con igual exuberancia vierten las frases musicales del Huapango, en medio de la algarabía y contento que se desprenden de sus voces, del arpa, de los violines y de las guitarras. En esa forma entregan sus versiones una docena de melodías que el gusto certero de los públicos ha colocado entre las clásicas del repertorio, como son: Balajú, El soldado de levita, Cielito lindo huasteco, A orillas del Papaloapan, etc., en las que se transmite al escucha un irrefrenable sentimiento de optimismo". Notas extraídas de la contraportada del disco elepé Al son del huapango editado en 1965 por el sello Columbia / Harmony.
Número de catálogo: HL-8258
Formato: disco plano de 12 pulg. a 33 r.p.m.
Productor: Gilberto Parra
Productor: Gilberto Parra
Canciones del disco: 1) Balajú; 2) El huerfanito; 3) La guacamaya; 4) El vaquero; 5) El soldado de levita; 6) La Cecilia; 7) Cielito lindo huasteco; 8) El torito jarocho; 9) A orilla del Papaloapan; 10) El jarabe loco; 11) Huapango nuevo